- Además de llaveros, camisas, ceniceros y otros souvenirs; los arácnidos son acompañamiento del mezcal tradicional.
Josélo Fuentes Delgado / La Voz de Durango
No solamente es el gusano de maguey dentro de las botellas de tequila para degustar y enriquecer el sabor tradicional de la bebida, ahora el alacrán enriquece el mezcal de Nombre de Dios que se vende en varias tiendas de recuerdos y mercados del Centro Histórico, creando la novedad para todos aquellos amantes de este licor que osadamente deciden consumirlo con todo y el alacrán.
Van desde el mezcal de raíz (de color rojizo y oscuro), o el mezcal (claro y/o amarillento) solo dependiendo del color del barril o contenedor donde se haya envasado, si es de roble u otro tipo de madera para elaborar estos barriles donde reposa y almacena. Y también botellas de tequila de litro, hasta las pequeñas de recuerdo que son populares ya en los puestos dentro y fuera del mercado “Francisco Gómez Palacio” durante todo el año.
En la esquina de alguno de los pasillos de la entrada por avenida 20 de Noviembre, José Ángel, un joven de 17 años, con mucho valor, algo de paciencia y cuidado introduce alacranes de tamaño mediano en “botellitas” casi de juguete, donde vacía mezcal hasta llenarla y cerrarla con una tapa dorada, para depositar el envase lleno en una caja.
Previamente, cada arácnido se saca de varios botes de mayor tamaño con tapa y llenos de alcohol donde se preservan. Son acomodados en orden uno tras otro antes de ser introducidos en las diminutas botellas, que tendrán colocado un logo artesanal con forma de alacrán como sello distintivo.
Inertes, pero aún con el aguijón o lanceta, son tomados por las tenazas y se colocan dentro de la botella, “tengo mucha precaución para no picarme por accidente, a eso sí le tengo miedo. Pero es un trabajo como cualquier otro que hago con gusto”.