- Restauración de superficie afectada por incendio debe ser en máximo un año.
- Se impulsa acciones afirmativas y la igualdad sustantiva.
Por unanimidad, el Congreso del Estado aprobó las reformas a la Ley de Desarrollo Forestal y Sustentable del Estado, con la finalidad de impulsar acciones afirmativas y la igualdad sustantiva a favor de este sector, además de promover la restauración de los bosques por daños de incendios.
Después de analizar y realizar adecuaciones a las iniciativas presentadas por separado de los Grupos Parlamentarios del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Regeneración Nacional (Morena), la Comisión de Asuntos Forestales, Frutícolas y Pesca, sometió a consideración de los diputados locales los tres dictámenes correspondientes.
El primero de ellos, que establece las acciones afirmativas consideradas como medidas temporales, compensatorias o de promoción, a favor de personas o grupos específicos, para corregir situaciones patentes de desigualdad en el disfrute de derechos y garantizar la igualdad sustantiva de oportunidades.
Con el aval de los legisladores se promueve una política forestal estatal tendiente a garantizar oportunidades en materia forestal para las mujeres, la población indígena, los jóvenes y las personas con discapacidad.
La segunda reforma tiene el objeto de fortalecer y armonizar el ordenamiento local con la nueva Ley General en la materia, que entró en vigor el 5 de junio del año pasado.
De esta manera, se plasma que en el ámbito de su competencia, el Estado y los municipios, vigilarán que los proyectos de desarrollo hidráulico, electrificación, infraestructura vial y obra pública propia en las regiones forestales, cause el menor daño a los ecosistemas forestales, respetando la densidad de la red de caminos y brechas forestales.
Además de contemplar los lineamientos del Programa de Manejo del Fuego, el Sistema Nacional de Protección Civil y la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable.
La tercera reforma aprobada en el Pleno, establece que los propietarios, poseedores y titulares de autorizaciones de aprovechamiento de recursos forestales de terrenos de uso forestal, están obligados a llevar a cabo, en caso de incendio, la restauración de la superficie afectada en el plazo máximo de un año.