Por Omar García Rosales
Los vistosos y muy recordados años 80’s, no solo es la base de muchas películas actuales para presentarnos diferentes historias basadas en esa época, sino que también fue el nacimiento de una saga que nos dejó en claro que el negocio de cazar fantasmas podía ser muy lucrativo.
“Ghostbusters” (Los Cazafantasmas) es una película de 1984 dirigida por Ivan Reitman el cual nos presentó como los estudiantes Peter Venkman (Bill Murray), Ray Santz (Dan Aykroyd) y Egon Spengler (Harold Ramis) al ser expulsados de la Universidad debido a sus prácticas poco comunes en el área de los fenómenos paranormales, crearon un muy peculiar e inusual negocio nunca antes visto: El de cazar fantasmas. A pesar de ser considerados un fraude por la sociedad, la repentina invasión de fantasmas en Nueva York eleva su fama alrededor de la ciudad, obligándolos a expandirse contratando a Winston Zeddemore (Ernie Hudson) como un miembro del equipo.
Con el negocio en su más alto nivel, un antiguo ser de nombre Gozer comienza a causar estragos en el departamento de una mujer con la intención de acceder a nuestro mundo y así destruir la vida por completo. Nuestro grupo de héroes al ser los únicos que puede hacerle frente a Gozer tendrán que arriesgar sus vidas no solo enfrentando a este ser, sino a su destructor enviado para cumplir con su objetivo: un hombre de malvavisco gigante.
La película se convirtió en todo un éxito de taquilla al mezclar la comedia con la ciencia ficción, trayendo consigo a mediados de los años 80’s que la Ghostbuster-manía se esparciera por todo el mundo. Esto trajo consigo una exitosa adaptación a serie animada en el que se trajo consigo la adaptación de muchas historias, personajes y leyendas de todo el mundo, una segunda entrega en el cine, además de diferentes videojuegos, figuras, juegos de mesa e historietas.
No se pueden dejar de lado los grandes gadgets que la cinta trajo consigo, ya que el equipo de protones con el que retienen a los fantasmas, el medidor de energía PKE que sirve para localizar y medir el nivel de los fantasmas, así como el auto oficial del grupo: el Ecto-1, los convirtieron en los artículos más recordados en la historia del cine. Mención especial tiene el tema principal de la cinta interpretado por Ray Parker Jr., el cual ganó el premio BAFTA a mejor canción original, además de convertirse en uno de los grandes éxitos de la década de los años ochenta.
A 35 años del estreno de Los Cazafantasmas en el cine, la fama de la franquicia ha sufrido claroscuros en toda su vida. Ya que tras varios intentos fallidos por revivir la franquicia, nadie puede negar su legado y aportación a la cultura pop, con una base de fieles seguidores que están en la espera de un proyecto que traiga de nuevo la gloria de la Ghosbuster-manía en las nuevas generaciones.