- Quienes opinan diferente a AMLO son prensa vendida, fifí o conservadora.
- Durante la mañaneras, el presidente impulsa la desconfianza hacia los medios de comunicación y genera encono entre la sociedad; varios periodistas han sido agredidos.
Graciela Rosales/La Voz de Durango
Durante el primer año de su gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador coartó la libertad de expresión, vilipendió a la prensa, impulsó la desconfianza hacia los medios de comunicación y sigue exponiendo la vida de periodistas al calificar a todos los que no piensan como él, como prensa vendida, prensa fifí, prensa conservadora, etc., generando la polarización y el encono entre la sociedad.
En tales términos se expresaron algunos periodistas durante el sondeo realizado la mañana de este martes por este medio Informativo, Belem Hernández señaló que la prensa está siendo castigada por el presidente al imponer calificativos que impactan en la sociedad y, en consecuencia, algunos compañeros han sido agredidos en el ejercicio de su profesión.
Saúl Maldonado, periodista de muchos años en la entidad, piensa que la prensa ha sido menospreciada, se ha visto como un obstáculo y lo mismo que el presidente López Obrador criticó de otras administraciones gubernamentales, es lo mismo que ahora hace él personalmente, resta valor al trabajo periodístico bien hecho y busca crear una prensa acorde a los lineamientos de la Cuarta Transformación.
Las agresiones sufridas por compañeros periodistas en las marchas a favor y en contra del presidente son una muestra de la polarización que ha generado el jefe del Ejecutivo Nacional.
“Hablas bien del presidente, eres prensa objetiva, hablas mal de mí, eres prensa fifí, prensa conservadora”.
Enrique Campos, menciona que, para la prensa ha sido limitante, se han visto agresiones, la falta de apoyo a compañeros que sufrieron un accidente durante la cobertura de una gira presidencial y en esa ocasión como en otras, los comentarios del presidente no han sido los más apropiados; no hay esa libertad de expresión que se había prometido, pero además está impulsando la desconfianza hacia los medios de comunicación y el encono entre estos y la sociedad.
Por su parte, Elier Chávez Amaya, señaló, que López Obrador, les quitó el bozal, pero les puso otro, el de la Cuarta Transformación, y el caso más reciente es el de Brozo que se despidió con una frase que seguramente se recordará por mucho tiempo “Dos Payasos no caben en el país” y “al poder se le crítica, no se le aplaude”. Al presidente no le gusta que lo critiquen, la persecución a la Reforma es el mejor ejemplo.
Saúl Martín Ceniceros, claro y contundente, dijo reprobar las acciones del presidente López Obrador en contra de la prensa, “ha sido notorio, el número demandas y quejas que se han presentado por parte de reporteros a nivel nacional, que repercute a la prensa local en los estados, lejos de propiciar la libertad de expresión que en otros sexenios fue parcial, ahora se ha coartado en un grado máximo; se han visto agresiones a reporteros a raíz de las declaraciones del presidente y que antes no se daban.
Pizú Enríquez, directora de un medio informativo en la localidad, dijo que es una vergüenza cómo se ha tratado a la prensa en el país, porque está creando una división terrible entre los mexicanos, porque llama prensa vendida o fifí a quien le señala los muchos errores en los que ha incurrido el presidente López Obrador.