Durango recuerda al “Papa Peregrino”, a 30 años de su visita

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  • Ante miles de fieles, el Sumo Pontífice ordenó a 82 sacerdotes de todo el país en la Explanada Jardines.
  • Juan Pablo II, fue canonizado el 27 de abril de 2014 por Su Santidad Francisco.

Rebeca Aguirre de la Vara / La Voz de Durango

Fue el 2 de agosto de 1989, cuando el arzobispo de Durango, don Antonio López Aviña -de feliz memoria- informó de manera oficial que dentro de la visita que haría el Sumo Pontífice Juan Pablo II a México estaba contemplada su estancia de dos días en la capital.

Por lo tanto, López Aviña nombró de inmediato una comisión para que se encargara de la organización y logística en la que se integraron sacerdotes, además de religiosos y seglares. El coordinador General fue el empresario Alfonso Fernández de Castro Casas (QEPD), con la responsabilidad de revisar a cada detalle el desarrollo de la actividad de cada comisión.

Félix Cháidez Saucedo, también ya finado, tuvo la encomienda de la Comisión del Aeropuerto, esto con el fin de disponer en todo lo concerniente a la llegada del “Papa Viajero”, además de vigilar el orden de quienes le darían la bienvenida al interior del recinto.

Mientras, al presbítero Jorge Blanco Rodríguez – de feliz memoria- le correspondió la comisión de disponer en el Cereso No. 1, todo lo referente al orden y al lugar.

Fue el mismo Alfonso Fernández de Castro, quien se ocupó de la comisión organizadora del encuentro del Papa con tres mil empresarios en el Teatro Ricardo Castro.

Por su parte, los comisionados de la organización en la Catedral Basílica Menor de Durango, donde se congregaron dos mil religiosos, sacerdotes, así como personas pertenecientes a las diferentes asociaciones católicas y de fe, fueron los presbíteros Alberto Villalobos Salas y Javier Almeida Chi.

Y la comisión de la Eucaristía en la Explanada Jardines estuvo a cargo del lasallista Enrique Vargas Espinosa (QEPD), quien fue asistido por el padre Jesús Luévanos Becerra -de feliz memoria-.

Asimismo, el diseño del altar en la Explanada Jardines, corrió a cargo del arquitecto Carlos Ruiz Piña.

Y en la sacristía montada en la Explanada para el gran acontecimiento, así como la antesala, se utilizaron muebles de estilo clásico, mismos que fueron facilitados por la mueblería Lucerna.

LLEGADA DE JUAN PABLO II

Un día como hoy, pero de 1990, a las 10:40 horas, arribó a la ciudad de Durango, Su Santidad Juan Pablo II, quien ya era esperado por el entonces arzobispo, don Antonio López Aviña, así como miembros de órdenes religiosas, seglares y cientos de feligreses en el Aeropuerto General Guadalupe Victoria, en donde con su sencillez y humildad que lo caracterizaba, saludó a los ahí reunidos.

CERESO NO. 1

De ahí fue trasladado al Centro de Reinserción Social (Cereso) No. 1, donde el Sumo Pontífice, a bordo del papamóvil, podía observar que niños, jóvenes y adultos -quienes formaban de una valla humana- le daban la bienvenida. Ya en el Centro, el Obispo de Roma dirigió un emotivo mensaje a todas las Personas Privadas de su Libertad (PPL).

“Amadísimos hermanos y hermanas, en mi visita pastoral a México no podía faltar un encuentro enteramente dedicado a vosotros, como muestra de la solicitud de la Iglesia y del Papa por todas las personas privadas de libertad. Mi venida hoy a este centro se ensancha gozosamente en mi pensamiento y en mi deseo para abarcar con un mismo abrazo a todos los hermanos y hermanas presos del país, tanto en el continente como en las Islas Marías… ¡Muchas gracias por el afecto que habéis demostrado profesar a mi persona como Sucesor de Pedro y por vuestras oraciones al Señor y a su Madre Santísima!”

TEATRO RICARDO CASTRO

Posteriormente, Juan Pablo II se dirigió al Teatro Ricardo Castro, donde tuvo un encuentro con más de tres mil empresarios, y a través de un mensaje los motivó desde la Doctrina Social de la Iglesia.

“Queridos empresarios mexicanos, en mis viajes apostólicos he tenido siempre gran interés en encontrarme con los hombres y mujeres del mundo de la empresa. Estos encuentros son para mí ocasión de una comunicación más directa y abierta del espíritu que anima el Magisterio pontificio en materia social y, para vosotros, una oportunidad para mostrar la comprensión y acogida que reserváis a la Doctrina Social de la Iglesia.

Ocupáis un lugar de capital importancia en la configuración de la sociedad. Vuestras decisiones tienen un efecto multiplicador y especiales repercusiones en el tejido social y económico. Por eso es grande la esperanza que deposito en vosotros”.

CATEDRAL BASÍLICA MENOR

Al salir, la máxima autoridad de la Iglesia católica se dirigió a la Catedral Basílica Menor de Durango, lugar en el que saludó a los fieles de la Arquidiócesis y, en ellos, a todo el pueblo de México, donde encabezó una oración y dirigió un mensaje ante dos mil religiosos y sacerdotes.

“Desde esta hermosa Catedral de Durango deseo dirigirme a los fieles laicos de esta arquidiócesis y de toda la República. Vosotros, amadísimos hermanos y hermanas, formáis parte de un pueblo que se ha destacado por su fe profunda, hondamente mariana, por su fidelidad a la Iglesia y por una especial vinculación espiritual a la persona del Sucesor de San Pedro. Esta singular fidelidad ha sido puesta a prueba muchas veces; pero, con la gracia de Dios y el auxilio de María, habéis convertido esas ocasiones en momentos de ulterior fecundidad para la vida eclesial. La historia del pueblo de Dios en México es rica en testimonios ejemplares de laicos que hicieron de sus vidas una manifestación elocuente del amor de Dios y que, por ese mismo amor, no dudaron en dar lo mejor de sí cuando las circunstancias lo exigieron. El pueblo mexicano nunca debe olvidar su pasado, pues desde él ha de proyectarse al futuro”.

ORDENACIÓN SACERDOTAL

Enseguida se trasladó a la Explanada Jardines donde celebró la Eucaristía ante miles de fieles, en donde también ordenó a 82 sacerdotes de diferentes Diócesis del país, los cuales tuvieron el gran honor y la bendición de recibir el sacramento del sacerdocio ministerial de manos del Sumo Pontífice.

“Hermanos e hijos queridos: ¡Vosotros sois los sacerdotes de la última década del segundo milenio! ¡Vosotros sois los sacerdotes de una nueva etapa de esperanza para México! Sed siempre testigos de la verdad, de la justicia, del amor, especialmente hacia los más necesitados. Vuestra vida sacerdotal es una exigente vocación de servicio, de entrega, de dedicación plena a la obra de la nueva evangelización de México.

¡México necesita sacerdotes santos! ¡México necesita hombres de Dios que sepan servir a sus hermanos en las cosas de Dios! ¿Seréis vosotros de esos hombres? El Papa, que os ama entrañablemente, así lo espera. ¡Sed los santos sacerdotes que necesitan los mexicanos y que anhela la Iglesia! ¡Que Nuestra Señora de Guadalupe os acompañe siempre por los caminos de la nueva evangelización de América! Así sea”.

PRESBÍTEROS DURANGUENSES

Catorce de los sacerdotes ordenados, pertenecen a esta Iglesia local, seis de los cuales siguen en activo, siendo cinco de la Diócesis de Durango: el presbítero Francisco del Campo Galindo, párroco de la Catedral Basílica Menor; el presbítero David Ernesto Vázquez García, encargado de la Parroquia de San Marcos; el diácono Antelmo Martín Benítez Marín, encargado de la Parroquia de Nuestra Señora de la Salud; el presbítero Manuel Ruiz Serrano, encargado de la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús; y el presbítero Felipe de Jesús Espinoza Marín, adscrito a la Parroquia de Nuestra Señora de la Salud; y por la Diócesis de Gómez Palacio, el presbítero José de la Luz Rosales, encargado del templo Expiatorio.

“LAS MAÑANITAS”

Al caer la noche de ese tan agitado, pero tan emotivo miércoles 9 de mayo, el Papa polaco pernoctó en el Arzobispado, sin embargo, los músicos se hicieron presentes en la ventana del lugar ya entrada la noche, con “Las Mañanitas”, “México lindo y querido”, el “Corrido de Durango”, entre otras canciones, por lo que Juan Pablo II se asomó por el balcón, dio la bendición a todos los presentes y les dijo con su característica sonrisa que era momento de descansar, pero sin dejar de atender a todos los que lo llamaban e invocaban aclamando su presencia.

Alrededor de las 07:00 horas del 10 de mayo, una vez más “Las Mañanitas” no se hicieron esperar, pues una multitud de fieles lo aguardaba en la avenida 20 de Noviembre, Su Santidad una vez más se asomó por el balcón y saludó a cientos de duranguenses que ahí lo esperaban, especialmente a las madres, puesto que era un día especial para ellas.

ADIÓS DURANGO

Antes de dar por concluida su visita, el Santo Padre desayunó con representantes de la grey católica y de la sociedad, para después ser trasladado al aeropuerto, concluyendo el “Papa Peregrino” de esta manera su inolvidable estancia en esta ciudad.

Cabe destacar que Juan Pablo II es el único Papa que ha pisado el suelo duranguense, por ello, su visita se considera de gran relevancia, máxime una vez que ha sido exaltado a los altares por su santidad de vida.

QUIÉN FUE KAROL JÓZEF WOJTYLA

Karol Józef Wojtyła, nació el 18 de mayo de 1920 en Wadowice, Polonia. Fue el tercer y último hijo de Karol, un oficial del ejército polaco, y Emilia. Su hermano Edmund nació en 1906 y una hermana, Olga, murió de niña en 1914.

El 16 de octubre de 1978 Wojtyla fue electo para ser el Papa 264, el primero no italiano en 455 años. También fue el Papa más joven desde 1846, tomando el nombre de Juan Pablo II en honor a sus dos predecesores inmediatos, Juan XXIII y Pablo VI.

Su pontificado de casi 27 años fue el tercero más largo en la historia de la Iglesia católica, después del de San Pedro y el de Pío IX.

UN LíDER DEL SIGLO XX

Juan Pablo II fue aclamado como uno de los líderes más influyentes del siglo XX, recordado especialmente por ser uno de los principales símbolos del anticomunismo y por su lucha contra la expansión del marxismo por lugares como Iberoamérica, donde combatió enérgicamente al movimiento conocido como la teología de la liberación, con la ayuda de su mano derecha y a la postre sucesor, Joseph Ratzinger.

Jugó un papel decisivo para poner fin al comunismo en su Polonia natal y en toda Europa, además mejoró significativamente las relaciones de la Iglesia católica con el judaísmo, el islam, la Iglesia ortodoxa oriental y la comunión anglicana.

EL “PAPA VIAJERO”

Durante su mandato al frente de la Iglesia católica, Juan Pablo II visitó 129 países a lo largo de casi 27 años. Este hecho le hizo acreedor de ser conocido como el “Papa Viajero”, además hablaba 14 idiomas: italiano, francés, alemán, inglés, español, portugués, ucraniano, ruso, croata, esperanto, griego antiguo y latín, así como su idioma materno, el polaco.

HASTA SIEMPRE JUAN PABLO II

El papa Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005 a los 84 años, a causa de un shock séptico y un colapso cardiocirculatorio. Él padeció la enfermedad de Parkinson, artritis y otras dolencias.

SAN JUAN PABLO II

El 19 de diciembre de 2009, Juan Pablo II fue proclamado venerable por su sucesor, el papa Benedicto XVI, quien posteriormente presidió la ceremonia de su beatificación el 1 de mayo de 2011 y fue canonizado junto con el papa Juan XXIII el 27 de abril de 2014 por el papa Francisco.