- Se intensificará la vigilancia.
- Ya no habrá exhortos, ya no habrá recomendaciones, ya serán sanciones y en su caso clausuras de negocios en caso de reincidencia: Mario Pozo.
Alejandro Valencia / La Voz de Durango
Durante la Nueva Normalidad se intensificará la vigilancia por parte de los inspectores municipales sobre todo en el Centro Histórico y en plazas comerciales para que los comercios respeten las medidas de higiene, el juez Cívico Administrativo, Mario Gaspar Pozo Riestra, enfatizó que ya no habrá apercibimientos y se iniciará con la clausura temporal o definitiva de los negocios.
Aclaró que el 31 de mayo terminó la jornada nacional de Sana Distancia, debido a esto ya no hay dudas sobre qué medidas deben tomarse en los establecimientos comerciales, además desde hace dos semanas se celebraron reuniones entre el Juzgado Cívico Municipal y los diferentes grupos de comerciantes, líderes de mercados, Paseo Constitución, estilistas, fondas, antros y bares.
“Ya no habrá exhortos, ya no habrá recomendaciones, ya serán sanciones y en su caso clausuras de negocios en caso de reincidencia, clausuras definitivas en virtud de que la etapa de aprendizaje ha concluido el 31 de mayo”, señaló.
Las adecuaciones que deben implementar los comercios con el fin de poder operar bajo norma, es que al exterior del inmueble debe haber un tapete sanitizante y uno de secado, una persona que dispense el gel antibacterial y que revise la temperatura, debe existir una clara distinción de la entrada y salida del comercio, en el caso de las zapaterías, deben delimitar con una banda amarilla la mitad de sus sillas para evitar la aglomeración.
En general, debe estar a la vista del público un anuncio que establezca las personas que pueden ingresar, por ejemplo, los niños menores de seis años tienen la restricción de pasar, al igual que ciudadanos de la tercera edad, mujeres embarazadas y personas sin cubrebocas.
CLAUSURAS
Durante la cuarentena se clausuraron 25 establecimientos, pero sin sanciones pecuniarias debido a que en ese momento el país se encontraba en confinamiento, no obstante, hubo excepciones como Casa Ley que tuvo que pagar ocho mil 700 pesos y tienda Coppel, 17 mil 400 pesos, la razón de esto es porque pusieron en riesgo a la salud de los clientes al no acatar las medidas de higiene.