- Cada quien tiene su pasión, pero pocos con la naturaleza.
- La aventura es parte del ser humano y no todos la comparten.
Durango, Dgo.
La escalada deportiva es una actividad muy completa tanto a nivel físico como mental que nos aporta multitud de beneficios, pero sobre todo es una actividad de aventura ideal para disfrutar de un buen rato con amigos en contacto con la naturaleza, Isaac Favela Carrola, quien sin duda tiene una gran experiencia en esta disciplina y en esta ocasión La Voz platicó sobre su experiencia en el desarrollo de rutas y el escalar en diversos escenarios del estado es algo que disfruta mucho y hoy deseamos reconocer su trayectoria.
¿Cómo te iniciaste en el equipado de rutas de escalada?
Inicié a finales del 2010 en la ciudad de Guanajuato; mi mentor Rogelio de la Fuente es uno de los principales protagonistas en mi historia como escalador y equipado; cursaba el séptimo semestre de licenciatura en esta ciudad, donde conocí realmente lo que era la escalada. Durante esos 6 meses que viví ahí aprendí lo básico de nudos, cuerdas, maniobras, anclajes, y lo principal que es el respeto a la montaña. Recuerdo que el último fin de semana que estuve en la Bufa, la zona donde escalábamos, fue diferente ya que en lugar de escalar ese día aprendería lo que conforma una ruta, a esto me refiero a lo más básico de lo básico, pero con ese día me bastó para enamorarme aún mas de este hermoso estilo de vida y querer aprender en forma el cómo hacerlo y compartirlo.
¿Qué consideras para elegir y equipar una ruta?
Son muchos factores, pero para mí el principal es que es para todos, a qué me refiero con esto a que una ruta es mucha responsabilidad, es estética, es calidad, entre otros, de ahí parte lo técnico en el equipado que es conocer la roca, conocer y saber dónde y que material poner, como instalarlo, como es el acceso a la zona, entre otras cosas.
¿Cuánto cuesta equipar una ruta y cuentas con algún apoyo?
El equipar una ruta de escalda es costoso en todos los aspectos, es trabajo fisco; hay que limpiar, tirar roca, subir, bajar, cargar equipo, entre otros, y la parte económica que eso depende de las condiciones que ocupe la ruta, por ejemplo, en una roca de mala calidad, conglomerado, o zonas expuestas a humedad se ocupa instalar material inoxidable, resinas epóxicas, etc. A diferencia de zonas con buena roca que con parabolts y plaquetas es necesario, ahí varían los costos del material y de instalación. En cuanto al apoyo, algunas de las rutas que he equipado han sido con donaciones y cooperaciones que la gente me ha hecho, pero también o casi la mayoría de las vías que he desarrollado han sido financiadas por mis propios medios.
¿Cuál es tu mayor satisfacción al equipar una ruta?
Son varias cosas y es una pregunta difícil de responder por lo compleja que es, podría llenar varias hojas; una de mis mayores satisfacciones es ver cómo se ha desarrollado la escalada en nuestro estado, de tener un par de rutas ahora es complejo contarlas, otras de las cosas es crear algo de la nada, imaginarlo y plasmarlo; el ver a las nuevas generaciones, chicos y grandes, escalar una ruta que tu equipaste, que muchas veces les ayuda a vencer miedos, frustraciones o simplemente les da alegría y felicidad.
¿Cuántas rutas has equipado, cuál es tu favorita y en qué sectores están?
Al día de hoy entre las que he equipado solitario y en las que he colaborado creo que son entre 35 y 40 rutas de 55 que hay aproximadamente en los sectores; creo que todas tienen algo especial, todas me gustan, pero creo que dentro de las que más me han gustado sin duda “La Capirotada”, “El Perro Enyerbado”, “A gatas”, “El jorongo” y “Soul Rebel”; la mayoría de las vías se concentran en Balcones, pero está también Chupaderos, y la presa Guadalupe Victoria.