- El Congreso del Estado aprueba la revocación de mandato, con la que se busca darle poder a la gente.
- Ante la falta de resultados, después de tres años se podría quitar el gobernante en turno.
Rosy Gaucín/La Voz de Durango
El Congreso del Estado logró el consenso para aprobar la figura de revocación de mandato con la que se busca quitar al gobernador, que no esté dando resultados tras tres años de gestión.
Lo anterior fue informado en la rueda de prensa por el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jucopo), Iván Gurrola Vega, quien expuso que se trata de darle poder al pueblo.
Acompañado por la diputada, Martha Alicia Aragón Barrios, el legislador mencionó que la gente tendría el poder de quitar a un gobernador que no le está dando resultados, si bien la ciudadanía elige a sus gobernantes, “con este poder que le estamos dando a la ciudadanía también lo podrían quitar”.
Gurrola Vega, dijo que la revocación de mandato es una realidad gracias al presidente de la República, ya el titular del Ejecutivo federal, puede ser removido al igual que los gobernadores.
La revocación de mandato la podría solicitar la ciudadanía después de los tres años de Gobierno, si la ciudadanía decide que el gobernador ha fallado, podría remover al gobernador en turno, “esto es darle poder a los ciudadanos y a la democracia”.
Asimismo, es luchar contra la corrupción, es decir, que si alguien de los ciudadanos decide que no está bien, será una realidad que los puedan destituir, por eso estamos contentos, aseguró.
Reconoció que la revocación de mandato fue impulsada por los legisladores del PT-Morena, pero también se contó con el respaldo de los demás partidos políticos representados en este Congreso.
Explicó que para que esto sea una realidad se necesitan de 17 votos, que es la mayoría, por lo que fue respaldada por todos los partidos políticos con base en el consenso.
Respecto a la forma en cómo se promovería una revocación de mandato, detalló que se requiere el 10 por ciento de las firmas que conforman el padrón electoral y en este momento son aproximadamente un millón 300 mil electores, con este porcentaje se sometería a consulta, y habría una votación en este sentido, y con que salga la mayoría se destituiría al gobernante.
Dicha consulta estaría a cargo del órgano electoral estatal y en caso de destituirse, entraría en funciones el secretario General de Gobierno, por un periodo de 60 días. En tanto, el Congreso del Estado, elegiría a un sustituto que entraría para concluir con el periodo de los seis años.