MTF. Alfredo Arévalo
En alguna ocasión hemos escuchado hablar del empoderamiento, está muy presente en redes sociales y en diversos videos donde las protagonistas son en su mayoría mujeres y hablan sobre diversos escenarios donde se da preferencia al hombre y es necesario que la mujer tome control o se empodere.
Sin duda esto busca un equilibrio a manera social, pero lo que interesa en este artículo es cuando la mujer ha tenido una perdida y su relación se termina, ya sea por la muerte de su pareja o por separación, en este aspecto el duelo hace que la mujer pierda el control de lo que vale realmente y no alcanza a ver su verdadero potencial, por ello en un sentido terapéutico hablaremos del empoderamiento.
Si eres una de estas mujeres puedes recordar la sensación que deja el perder las expectativas, metas e ilusiones que se crearon en pareja, lo cual tiene un significado diferente cuando están presentes hijos de esa relación. Hay muchos factores que pueden influir en olvidarte de tu parte femenina y mantenerte como “mamá”, y esto trae un conflicto que se observa en el consultorio en diversas ocasiones y se disfraza de angustia, frustración o enojo.
Qué es empoderamiento
Se trata del proceso mediante el cual las mujeres aprenden a controlar sus decisiones, expresan necesidades y buscan la manera de aplicar estas decisiones a su vida en todos los aspectos. Esto se maneja diferente a varios niveles, en esta ocasión hablaremos de los que se relacionan directamente con alcanzar el bienestar personal de la mujer que se queda a cargo de sus hijos.
¿Por qué se habla solo de empoderamiento femenino?
En un sentido cultural (mismo que ha cambiado en los últimos años), y hablando de un sentido de familia tradicional, los roles de la mujer y hombre estaban definidos como proveedor y cuidadora; y aun cuando los sistemas familiares han tenido una evolución hay mandatos familiares que tenemos interiorizados y que nos obligan en algún momento a seguir ese rol.
Ahora como ya hemos hablado de lo que es el empoderamiento, este tiene que ver con recuperar la independencia, pero no solo en los niveles sociales, sino también en los personales, donde es necesario modificar significados, dejar mandatos familiares y pasar de una actitud pasiva a la acción para hacerse responsable de las decisiones que ha tomado para dirigir la propia vida.
Para ello vamos a diferenciar lo que es autonomía, porque al momento de poder tomar ciertas decisiones estas actuando de manera autónoma, en este sentido todos podemos ser autónomos de manera automática, sin embargo pocos conseguimos ser independientes, pues esto significa ser responsables de nuestras acciones, y no proyectarlas a otros, que en ocasiones cuando sucede la separación es lo que se hace, algunas pacientes piensan que si “él” no se hubiera ido ellas podrían haber alcanzado sus sueños.
Ahora la pregunta que hacen en este sentido podemos dividir nuestra vida en distintas áreas: salud (física y mental), familia, trabajo, relaciones (de amigos y pareja), etc. Y con ello analizar las áreas que necesitan más dedicación, pues como es normal, en unas áreas tendremos mayor desarrollo con menor esfuerzo, mientas que otras serán más complicadas.
Para mejorar es necesario cuestionarse si lo que hacemos es suficiente o podemos hacer algo más
- Salud
¿Qué tanto cuidas de ti? ¿Enfermas con frecuencia? ¿te sientes cansada en qué circunstancias? ¿Haces ejercicio? ¿te das tiempo para descansar y estar contigo?
- Finanzas
¿Tienes suficiente dinero? ¿puedes ahorrar? ¿te privas de cosas? ¿puedes ganar más?
- Trabajo
¿Estás bien en tu trabajo? ¿Te sientes importante en él? ¿Tu salario y tu horario se ajustan a tus necesidades?
- Ocio
¿Qué cosas haces para ti? ¿haces algo que te interese? ¿antepones tus obligaciones a pasar tiempo contigo?
- Relaciones
¿te sientes mal al pensar en tener (o no) pareja? ¿te das tiempo para salir con otras personas? ¿Te disgusta o te agrada salir? ¿dices lo que te incomoda a pareja o amigos?
- Desarrollo personal
¿Qué actividades realizas para crecer como persona? ¿has cambiado? ¿Buscas alternativas para crecer y mejorar?
Estas preguntas son solo un ejemplo de lo que puedes hacer para ir evaluando cada aspecto de tu vida, puedes incluir la relación con tus hijos, con tus padres y hermanos, amigos, etc. Y lo más importante es que este ejercicio se debe hacer de manera constante para que te des cuenta de los cambios que has tenido, que aspectos de tu vida requieren mayor atención y como puedes mejorar.
Si estás buscando empoderarte por esta o cualquier otra situación, es mejor si lo haces acompañada de un profesional, que te pueda apoyar a superar el duelo y enfocarte para conseguir este objetivo. Aun cuando este artículo se enfocó a mujeres que han sufrido una separación, este ejercicio también lo podemos hacer los hombres, el empoderamiento se ha utilizado desde un contexto social, pero de manera personal todos necesitamos empoderarnos en diversas áreas,
“El fuerte hace su destino; el débil sufre el que le impone la suerte.”. Alfred De Vigny.
Si quieres iniciar un proceso terapéutico personal, de pareja o familiar, puedes contactarme al 618-152-79-65; estaré encantado de poder ayudarte.